El Templo del Fuego es un santuario ancestral situado en el Volcán Gulug, en el Continente Aislado de Gaia, en Final Fantasy IX. En su interior se encuentra el Espejo de Fuego custodiado por Malilith.
Para conseguir acceder al mundo de Terra, el grupo necesita reunir los cuatro espejos elementales, situados cada uno en su respectivo templo protegido por su guardián. Para perder el menor tiempo posible, el grupo se divide en cuatro parejas y cada una viajará en el Hildagarde a un santuario.
Freija y Amarant son los destinados al Templo del Fuego. Tras derrotar a Malilith, el monstruo que guarda el artefacto, son rescatados por la aeronave.
Curiosidades[]
- Los templos son un guiño a los santuarios elementales de los primeros Final Fantasy, donde se encontraban los cristales elementales.
- Investigando en los datos del juego, algunos informáticos lograron descifrar secuencias numéricas que delataban varias formaciones de batalla y monstruos eliminados antes de la versión final. De ello se deduce que en un principio, el jugador se enfrentaría a los cuatro guardianes de cada templo en lugar de solo uno.